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OH! L'AMOUR, L'AMOUR...

Actualizado: 6 feb 2021


Entramos en febrero, ¡el mes del amor!

Me encanta este mes, quizás sea porque soy una fan del amor, o porque mis padres se casaron un 14 de febrero y aún hoy en día son de esas raras parejas que siguen enamorados después de 50 años. Yo nací a finales de noviembre, así que creo que en ese mes también empecé a existir. ; )


¿Qué es el amor?

El amor es pura energía, la más poderosa que existe en el universo. Todo en la naturaleza se desarrolla por amor, el amor es una energía creativa y su opuesto no es el odio, sino el miedo.

El amor es mucho más que el amor romántico, ese de color "rosa" al que todos jugamos desconociendo el verdadero significado del AMOR.

En el amor romántico hay apego, manipulación, distorsión y evasión de responsabilidades. En este falso tipo de amor caemos una y otra vez en trampas que nos alejan de nuestro propio camino de vida.

En el amor romántico nuestra comunicación se basa en pedir:

Cariño, mi corazón late por ti, así que está en tus manos y a partir de ahora su felicidad depende de ti.

Y es que tenemos un concepto equivocado del amor, empezando por el amor a uno mismo, el primero que deberíamos cultivar si queremos dar y recibir amor. Creemos que está fuera de nosotros y por eso buscamos y buscamos, nos frustramos y sufrimos.


Amarse más para amar de verdad

Siempre me ha parecido curioso que existan palabras como autoaprendizaje, autoconfianza, autoestima, pero no exista la palabra autoamor, al menos no literalmente, entiendo que su homólogo es la autoestima. Tener en estima algo es amarlo, y eso significa querer que esté bien, que no le pase nada malo, y si está dirigido a una persona, lo que queremos es que sea feliz, incluso por encima de ti.

¡Hay!, pero nuestro concepto del amor romántico no suele ser así para nada, ni mucho menos.

Primero idealizamos ese amor, luego intentamos cambiarlo, adaptarlo a nosotros y como es imposible conseguirlo, al final nos agobia o lo que es peor empezamos a "quererle mal". Otra curiosa expresión, ¿cómo se puede querer…mal? o se quiere o no se quiere, no hay más.

Igual que no amanece anocheciendo, no deberíamos conjugar amar con palabras como mal, dolor, sufrimiento, egoísmo, apego...


¿Qué nos pasa con el amor?

Pues muchas cosas, yo voy a explicarte algunas de ellas en este post:

En primer lugar no sabemos querer, y el origen de esto es que no sabemos querernos a nosotros mismos primero. No puedes dar lo que no tienes.

En segundo lugar y como te decía al principio del post, confundimos AMOR con enamorarse. Nos enamoramos de nuestro propio reflejo en los ojos de la otra persona o de nuestra percepción idealizada de él o de ella. Ensalzamos hasta el extremo lo que nos gusta de esa persona y minimizamos sus defectos, vamos, que vemos lo que queremos ver.

Pasa el tiempo y...

¿Recuerdas tu historia de amor? como te gustaba al principio, esas mariposas en el estómago cuando os encontrabais…seguramente tienes a esa persona ahora mismo a tu lado, muy cerca de ti, pero ya no la ves igual, puede que incluso, a veces, hasta te moleste su presencia.

¿Qué ha pasado? pues que ya no la ves a ella, si es que alguna vez la has visto en verdad. No vemos la realidad, sino nuestras percepciones de la misma, reinterpretadas por nuestra mente en base a experiencias pasadas, nuestras propias proyecciones, creencias y un montón de etcéteras más.

Ahora cuando la miras solo ves todas las historias, desengaños, decepciones, aburrimiento y fracasos que tu mente te recuerda. Puede que esa otra persona haya cometido errores, igual que tú, porque las relaciones son cosa de dos, pero solo ves los del otro, es la excusa para no asumir nuestras responsabilidades. Criticamos, nos quejamos, rechazamos…pero esto no ayuda en nada ¿verdad?

Olvidamos que todos lo hacemos lo mejor que podemos en cada momento aunque a veces, también todos metemos la pata pero bien metida. Detrás siempre están nuestros miedos mas ocultos e inconscientes, que por cierto no trabajamos en absoluto.


Autoconocimiento

Esto nos lleva al principio de este post, ¿cómo podemos pretender amar a otro si no nos amamos a nosotros mismos? Tú no quieres sufrir, pero no encuentras la forma de librarte de tus miedos, buscas fuera lo que solo encontrarás dentro, crees que sabes porque el otro actúa como actúa, mientras tú no te entiendes ni a ti mism@ y encima reclamas que la otra persona te conozca y te dé lo que necesitas, ¿acaso te has parado a sentir que necesitas tú realmente?

La pasión y la ilusión dio paso a una comodidad que dejó de cuidar, por ambas partes, eso que os unía, o lo que es peor que le sirvió a cada uno para evadir la responsabilidad de su propia vida. La responsabilidad de tu felicidad es solo tuya y de nadie más.

Aparece un marcador en el campo de juego: "yo he hecho por ti", "tú no has hecho por mi"...

En realidad esa persona seguramente es más o menos la misma que era cuando la conociste, pero para ti es completamente diferente, aquello que te encantaba de ella o ya no lo ves o ahora incluso te molesta.


Quizás ambos habéis cambiado, habéis evolucionado de forma diferente y vuestros caminos ya no son los mismos, pero ahí estáis empeñados en encontrar culpables a esta falta de entendimiento.

¿Y si dejáramos ir esas historias que nos contamos y comenzamos a querer "conocer" para poder "comprender"?

No volveremos al primer día, ya es pasado, y quizás tampoco nos espere un futuro juntos, pero desde luego si hay una posibilidad de averiguarlo es haciendo algo diferente, dejar de poner el foco de la crítica en el otro, tú solo puedes trabajar contigo mismo.

Yo no sé si el amor es para toda la vida, si el ser humano está hecho para tener un solo compañero de vida o no, ni siquiera si eso es importante, si existe la media naranja… de hecho leí no hace mucho un artículo en una revista sobre los resultados de un grupo de investigadores de una universidad de Canadá que habían analizado a 11.000 parejas determinando que el éxito de una relación se encuentra más en como se construye ésta y no tanto en las características individuales de cada miembro de la pareja.


Reescribe tu historia de amor

El amor es maravilloso pero su esencia es dar no pedir, es un acto de generosidad, no de acaparar, ni de necesitar, ni de responsabilizar al otro de nuestra propia felicidad.

La relación tiene que ser fuerte y a la vez flexible para adaptarse al desarrollo individual de cada uno y tiene que ser valiente para descubrir si en algún momento vuestros objetivos comunes ya no lo son y ser capaz de enfrentarse al hecho de que quizás la pareja se disuelva.

Buda decía que ningún tipo de amor entraña sufrimiento, si sufres no es amor. Puede haber dolor pero el sufriendo es la carga emocional que añadimos nosotros.

La química no necesariamente es amor.

La comunicación violenta no es amor.

El sacrificio no es amor.

¡Madre mía! pues vamos a tener que reescribir la historia, y no solo de las películas y las novelas, en general, de la mayoría de los seres humanos.

En realidad no hay que reescribir nada de lo que pasa fuera, sino reescribir tu propia historia de "autoamor", atreverse a sentir desde otro lado, desde dentro.

Y ¿por dónde empezamos? .

En primer lugar podemos empezar por preguntarnos:

---¿Quién tiene la llave de mi corazón?


Solo la tenemos nosotros, pero nos encanta pensar que la tienen otros porque así no tenemos que preguntarnos si estamos tratándonos como nos gustaría, tenemos a otros para acusarlos de nuestros sufrimientos.


Las tres A's

Para mí el amor "romántico" son tres A's: Admiración, Atracción y Amistad. Son dos personas que han decidido libremente caminar juntas, cada una con su mochila, por supuesto, porque comparten objetivos comunes.

Durante el camino, puede ser que evolucionen diferente, y es entonces cuando ambos deberían hablarse con cariño y sinceridad, planteando la situación tal cual es, en vez de tirarse los trastos a la cabeza, ampliar sus periodos de silencio, atacar, engañar, sufrir...

Pero suele aparecer el miedo, que se expresa a través de la ira, el odio y la culpabilidad hacia el otro, aunque en verdad, lo único que esconde es miedo a estar solo, a que no me quieran.


Desconoces que si tu te quieres a ti mismo, todo él que te acompañe será para sumar no para sustituir lo que tú no eres capaz de darte.

Ada, una de mis hijas, me contó no hace mucho, que la forma del símbolo del corazón que todos conocemos nació de juntar dos corazones reales, no lo sabía, ni he buscado si esto es cierto o no, me pareció ¡tan bonito! que no necesito saber más.

Si eres mami o papi puede que coincidas conmigo que no hay amor más grande que él que sientes por ellos. Es el más generoso, empático y desinteresado de todos, ellos son lo que más te importa, quieres su bien por encima de todas las cosas del mundo.

¿Te das cuenta lo diferente que es al amor de pareja tal y como se entiende en esta sociedad?

Más del 50% de los asesinatos de mujeres son a manos de sus parejas o exparejas, y no es que me quiera poner feminista, la cifra es la que es, y es brutal y deleznable.

Pero quiero destacar también que hay muchas formas de matar en vida, conozco a bastantes hombres "muertos en vida" porque su ex ha utilizado a sus hijos como arma para amargarle, arruinarle y que jamás vuelva a levantar cabeza.

¿Pero qué nos pasa? ¿En qué punto el amor se convirtió en un odio tan enfermizo que además condena por igual al que lo siente? Esa es la delgada, delgadísima línea que tenemos que aprender a hacer más y más evidente en nuestra vidas para darnos cuenta de cuando estamos a punto de cruzarla y esto se consigue entrenando mente, cuerpo y emociones, el único camino para el desarrollo del autoconocimiento, la autoconfianza y la autoestima.


Cómo súper-vivir al Amor-desamor


Esa imagen de dos corazones juntos me sirvió de inspiración para un nuevo kit de super-vivencias, 4 sesiones para acompañarte individualmente o en pareja a iniciar un nuevo camino de autoconocimiento que os permitirá desarrollar y/o afrontar el amor y el desamor de forma constructiva.

La idea de mis kits nació la pasada navidad, proponiendo regalos originales, experiencias de crecimiento personal para regalar o regalarte a ti mism@.

Disfruté diseñándolos y a la gente le encantó poder regalar clases de yoga, iniciaciones a la meditación, técnicas para reducir el stress o como crear un plan de acción para poner en marcha un proyecto o un cambio en tu vida.

¿Por qué encasillar el crecimiento personal en un marco estrictamente formal, serio y casi estigmático?

La medicina en occidente es paliativa, cultivamos el cuerpo en los gyms desde el ego, las emociones están anestesiadas y compramos y regalamos cosas materiales para llenar ese vacío.

Ser libre para desarrollar la creatividad en mi propio negocio es un regalo que me ha dado la vida, bueno, en realidad ha sido la consecuencia lógica de arriesgar para descubrir el propósito de mi vida, entrenar diariamente para conseguir mis objetivos y superar mis miedos cada vez que se presentan aceptando y transformando.

Así que te invito a través de mis kits a que tu regales o te regales sesiones de entrenamiento de tus tres TUS para saber que quieres realmente y poder afrontar todo lo que venga de fuera de una forma creativa hasta conseguir tus objetivos.


Si quieres saber más sobre este kit aquí te dejo el enlace:


No dudes en consultarme lo que quieras, te escucho. Y este es mi mail, rachel@sientepiensacree.com , por si quieres contarme tu historia.

Recuerda que no entiendes de amor hasta que no aprendes a amarte.

RACHEL K.


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